El Costo de No Arriesgarnos
- Adriana Murillo
- 20 feb 2014
- 3 Min. de lectura
Otro libro impresionante por Steve Furtick. Este se llama "Crash the Chatter Box" y trata de como escuchar la voz de Dios por encima del todas las demás y como trabajar las inseguridades y miedos en nuestra mente. Y no se ustedes, pero una de mis mayores luchas es controlar mis pensamientos y en este post quiero compartirles un poco de lo que podido interpretar e interiorisar para mi propia vida, al leer este libro.
Siempre que pensamos en dar un salto de Fe, y sentimos miedo, pensamos inmediatamente en miles de razones por las cuales sería mejor no hacerlo, pero últimamente Dios me ha estado enseñando que también debemos preguntarnos el costo de no hacerlo.
Que hubiera pasado si Pablo hubiera decidido no predicar el evangelio o no escribir las cartas a las iglesias primitivas, porque se sentía culpable y no dingo porque había perseguido a miles de cristianos antes de conocer a Jesús. Que hubiera pasado si Moises no hubiera hablado con el faraón para liberar al pueblo de Israel porque era tartamudo y sentía que iba a hacer ridículo. Que hubiera pasado si Abraham no hubiera salido cuando Dios le dijo -ve a la tierra que te voy a dar-, porque sintió que Dios no estaba siendo lo suficientemente específico y que hasta que le dijera para donde iba exactamente, mejor no ir. Que hubiera pasado si Pedro no se hubiera mandado a caminar sobre la agua porque simplemente no tenía sentido y se veía imposible de lograr. Quizás la Biblia hoy estaría llena de otros personajes y otras historias.
A veces parece que se nos olvida que Dios nos conoce a perfección, se nos olvida que El mismo nos entretejió con sus manos y que sabe cuales son nuestra fortalezas y debilidades. Por ejemplo, Dios sabía la edad de Abraham y Sarah cuando les prometió un hijo! o acaso pensamos que fue que lo dijo y después pensó -ayyyy que torta, pero si es que están muy viejos, ya no pueden tener hijos-. No, por el contrario, el sabiendo la situación, decidió demostrar su amor, su poder y su propósito, al hacer el milagro de darles un hijo.
Ahora, todos ellos, son tan parte de la historia que Dios quiere escribir como nosotros. Entonces quienes somos nosotros para decirle a Dios que no nos use, más bien deberíamos sentirnos honrados y agradecidos que nos permite ser parte de su historia. Ahora, claro que Dios pudo haber cumplido sus propósitos por medio de otras personas, pero decidió que quería usarlos a ellos y ellos aceptaron el reto, aún en medio de sus debilidades, miedos e inseguridades.
Así que cuando estemos en ese momento donde tenemos que tomar una decisión que nos reta y atenta con sacarnos de nuestra zona de confort, que tal si en lugar de pensar en lo que puede salir mal si lo hacemos, pensamos en lo que puede no ser de bendición si no lo hacemos. Imaginemonos por un momento, que pasará si no le hablas a tu compañero de trabajo de Jesús porque te da vergüenza, que pasará si decides que servirle a Dios no es lo tuyo porque piensas que no tiene el talento o la experiencia suficiente, que pasará si decides que mientras Dios no te diga claramente lo que va a pasar, no te vas a mover, que pasará si decides no saltar porque te da miedo. Lo que pasará es que te perderás la oportunidad de escribir historias de relevancia eterna con Dios. Y la verdad que eso sería una lástima!!!
De todo corazón les digo: "EL COSTO DE NO ARRIESGARSE POR MIEDO, ES MUCHO MAYOR QUE EL COSTO DE ARRIESGARSE POR FE"

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